José Antonio Marina (1939-), filósofo, pedagogo y profesor de Instituto, dice: “No es el error, sino la inacción, la inercia, lo que hace fracasar al hombre”.
El error o el fallo pueden estimularnos para buscar nuevos caminos, en cambio, la inacción y la inercia ya constituyen un fracaso en sí mismas.
El quedarnos de brazos cruzados sin hacer nada o hacerlo todo por inercia, esto ya es puro fracaso, derrota total.
Salgamos de la inacción y de la inercia y lograremos evitar el fracaso y la derrota. Lo que importa es la diligencia que nos enseñe a buscar nuevos caminos de conducta.
Sin diligencia, nos quedamos anquilosados en el camino de la vida y caemos en la vulgaridad y la rutina. Y estas nos hacen personas mediocres sin horizontes de futuro.
Artículo 484 de la columna “Punto ético” publicado en el diario Última Hora el jueves, día 28 de octubre de 2021, pág. 28.